José Antonio Artés Hernández, «Lc 19,1-10 – Hch 20,7-12 – Passio Pauli I (104.8-106.15): Análisis Comparativo», Vol. 16 (2003) 49-67
The present paper states the author’s contention that canonical Gospels
and the Apocryphal Acts of the Apostles present some similarities. Within
this purpose, he provides a comparative study of three key passages, Lk
19:1-10, Acts 20:7-12 and Passio Pauli I (104.8-106.15), which includes,
on the one hand, phonetic, morphological and syntactical matters, and, on
the other, lexical uses and stylistics. On the basis of this analysis the author
concludes that, at a general level, the parallelisms between these texts mostly
concern contents and only occasionally grammar and vocabulary.
Lc 19,1-10 – Hch 20,7-12 – Passio Pauli I (104.8-106.15): análisis aomparativo 51
parábola de la oveja perdida (Lc 15,4-7, con antecedentes en Ez 34,16).
Jesús llama, individualmente, a Zaqueo, pidiéndole que le reciba en su
casa: el texto subraya el hecho de que fue acogido con alegrÃa y con pron-
titud (cf. 19,6: καί σπεύσας κατέβη καὶ ὑπεδέξατο αá½Ï„ὸν χαίÏων). Es
entonces cuando Zaqueo manifiesta su propósito de devolver el cuádruplo
de lo que habÃa defraudado (19,8: εἴ τινός τι ἐσυκοφάντησα ἀποδίδωμι
τετÏαπλοῦν), yendo más allá de lo que era la pena que la Ley imponÃa a
los ladrones3.
Verba4.
Desde el punto de vista fonético podemos destacar el empleo en 19,5
y 19,9 del término σήμεÏον, calificado por Schmid como vulgarismo5, en
lugar de la forma ática τήμεÏον, ello en contra de la tendencia de Lucas
a la introducción ocasional de aticismos en su obra, no por un deseo
consciente de vuelta a los modelos antiguos, sino por su conocimiento de
la historiografÃa ática6.
También podemos destacar la fluctuación ει / ι observable en la forma
ἡμίσια (19,8)7. En la época helenÃstica las vocales largas de timbre e se
cierran y tienden paulatinamente hacia el timbre i, variación que afecta
a la e larga abierta (η) y a la e larga cerrada del jónico-ático, esto es, el
diptongo ει8.
Dentro de la morfologÃa nominal, por lo que respecta a los nombres
propios de lugar o persona de procedencia hebrea, o bien se “desfiguranâ€
y se acercan de forma paulatina a la forma romano-helenÃstica, como
es el caso del nombre del protagonista de la perÃcopa que estudiamos,
Ζακχαῖος, declinado por la flexión temática (cf. 19,5 voc. Ζακχαῖε), o
bien permanecen inalterables y, de llevar artÃculo, sólo se flexiona éste: v.
19,1 τὴν ἸεÏιχώ o 19,9 υἱὸς ἈβÏαάµ, donde el nombre propio se halla en
genitivo pero sin haber sufrido variación alguna9.
Cf. Ex 21,37, Lv 5,20-26 y Lc 3,12.14.
3
Una amplia reseña bibliográfica sobre la lengua y el estilo de Lucas puede verse en A.
4
Piñero – J. Peláez, El Nuevo Testamento. Introducción al estudio de los primeros escritos
cristianos (Madrid 1995) 471-72, n. 375.
W. Schmid, Der Atticismus in seinen Hauptvertretern IV (Hildesheim 1964) 580; cf.
5
asimismo A. López Eire, “La lengua de la comedia aristofánicaâ€, Emerita 54 (1986) 248.
Cf. Piñero – Peláez, El Nuevo Testamento, 473.
6
A. Merk, Novum Testamentum graece et latine (Romae 101984) prefiere en su edición
7
la variante ἡμίσειά.
S.T. Teodorsson, The Phonemic System of the Attic Dialect 400-340 B.C. (Lund 1974)
8
294-95, concluye que ya en el año 340 a.C. los diferentes grafemas ΕΙ, Ι, Η, ΗΙ representaban
en ático un único fonema /i/. A este respecto también puede consultarse, entre una amplÃ-
sima bibliografÃa, I. RodrÃguez Alfageme, “Notas sobre la evolución del sistema vocálico en
la koinéâ€, CFC 9 (1975) 339-379.
Cf. O. Hoffmann – A. Debrunner – A. Scherer, Historia de la lengua griega (Madrid
9
1973) 302-03.